La necesidad de actualizar la normativa que regula el cabotaje fue el eje central de la audiencia pública organizada por la Agencia Nacional de Transportes Acuáticos (Antaq, por sus siglas en portugués) de Brasil.
En el encuentro se destacaron propuestas para equilibrar la competencia, fomentar empleos locales y fortalecer el desarrollo económico nacional a través de esta actividad estratégica.
El vicepresidente de la Asociación Brasileña de Armadores de Cabotaje (ABAC), Luiz Fernando Resano, enfatizó la importancia de desglosar las actividades de cabotaje en el marco de la revisión normativa. Señaló además que es crucial garantizar que las empresas brasileñas operen con embarcaciones adecuadas, evitando el uso de subvenciones por parte de compañías que utilizan embarcaciones extranjeras, lo que no genera empleo local ni contribuye a la economía nacional.
“Esto crea una competencia desleal”, afirmó, además de proponer una revisión de los requisitos técnicos para agilizar la concesión de autorizaciones y asegurar el transporte efectivo de cargas en Brasil.
En sintonía con estas propuestas, el gerente de autorizaciones de ANTAQ, Eduardo Pessoa de Queiroz, señaló la necesidad de segmentar los perfiles de navegación para establecer criterios específicos.
“Estamos considerando dividir la navegación de cabotaje en perfiles, como carga general, graneles sólidos agrícolas y minerales, para aplicar subvenciones más específicas”, explicó.
El director Lima Filho aportó una visión técnica sobre la diferenciación entre navegación costera y cabotaje comercial.
“Es esencial establecer límites claros para evitar confusiones conceptuales. No todas las operaciones costeras califican como cabotaje comercial, y esto debe reflejarse en la normativa”, subrayó.
La propuesta normativa en discusión busca definir criterios para autorizar y regulares empresas brasileñas dedicadas al cabotaje, la navegación de largo recorrido y el apoyo marítimo y portuario, además de establecer reglas para el registro de Empresas de Inversión Naviera Brasileña. Antaq ha extendido el plazo para recibir aportaciones hasta el 4 de diciembre de 2024, invitando a los actores del sector a participar en el desarrollo de un marco regulatorio que impulsa el crecimiento del cabotaje como eje clave de la economía nacional.
Este proceso representa un paso hacia la modernización del transporte marítimo en Brasil, priorizando la competitividad, el empleo local y la eficiencia en el sector naviero.