Los problemas en Europa no cesan en torno a la comercialización de granos, con los conflictos de los agricultores y la guerra entre Rusia y Ucrania como escenario.
Los agricultores polacos bloquearon la frontera de su país con Ucrania por segunda semana consecutiva en el marco de la protesta de estos en función de lo que catalogan de “competencia desleal”.
Entre las acciones, cortan el paso los trenes cargados de granos y derraman la mercadería en el suelo.
Según informó el portal Euronews, el presidente ucraniano se refirió a esta situación este miércoles cuando, a través de un video, “advirtió a Bruselas de que Moscú podría beneficiarse de este conflicto”.
Asimismo, se indicó que el mandatario ucraniano “instó directamente al primer ministro polaco, Donald Tusk, a reunirse con él personalmente para mantener conversaciones para desbloquear el paso fronterizo”.
En ese sentido, Zelenski aseguró que «hay que preservar la unidad de Europa” y que este problema “redunda fundamentalmente en el interés de la propia Unión Europea (UE)”.
De acuerdo con la información consignada por Euronews, “las tensiones en torno a las importaciones ucranianas vienen gestándose en Polonia y otros países del este de la UE desde abril del año pasado, cuando la UE levantó las tasas de aduana a una amplia gama de productos ucranianos, en un intento de ayudar al país a impulsar sus flujos comerciales en medio de la invasión rusa, evitando también la escasez mundial de alimentos”.
La medida fue rechazada por agricultores de Polonia, Hungría, Eslovaquia, Rumanía y Bulgaria, por considerar que el acceso de los alimentos ucranianos a estos países, redujeron los precios y la competitividad de los productores locales.
A nivel político, existe un proyecto de ley de la UE que permitiría aplicar “medidas correctoras” a la importación desde Ucrania, pero la medida aún está en debate.
Mientras tanto, Polonia mantiene su bloqueo unilateral contra las importaciones procedentes de Ucrania.