El presidente argentino, Javier Milei, evalúa una drástica reforma en la relación de su país con el Mercosur, considerando incluso la posibilidad de abandonar el bloque regional. La propuesta, según fuentes cercanas a la Casa Rosada, busca permitir a los países miembros negociar acuerdos de libre comercio de manera independiente, rompiendo con las normativas actuales que exigen negociaciones conjuntas.
“Si no se modifican las condiciones o se transforma en un bloque de mercado común, es una posibilidad fuerte que rompamos. El Mercosur no funciona, es un sistema diseñado para los industriales de San Pablo”, dijo un alto funcionario de la administración de Milei en declaraciones al canal argentino TN.
La postura se alinea con la crítica histórica del mandatario, quien durante su campaña calificó al bloque como «una unión aduanera defectuosa que perjudica a los argentinos de bien».
Asimismo, se acerca a la posición de Uruguay, que desde el comienzo de la administración del actual presidente, Luis Lacalle Pou, marcó la necesidad de poder negociar de forma bilateral con otros mercados si los demás países del Mercosur no acompañaban, u obstaculizaban, un tratado del bloque.
En el centro del debate está la Decisión 32/00 del Consejo del Mercado Común, que establece que los países del Mercosur deben negociar colectivamente acuerdos comerciales con terceros países o bloques. Este marco limita la capacidad de sus integrantes para firmar tratados preferenciales de manera unilateral, lo que el gobierno de Milei considera un «corset» para las aspiraciones comerciales de Argentina.
Postura oficial y próximos pasos
En declaraciones previas, el ministro de Relaciones Exteriores argentino, Gerardo Werthein, sostuvo que el objetivo del gobierno es abrirse al mundo y flexibilizar las reglas del Mercosur.
“Los acuerdos están pensados para ayudar a los países, no para ser un corset”, afirmó Werthein, y agregó que esta evaluación será parte del análisis en la próxima cumbre del Mercosur, prevista para los días 5 y 6 de diciembre en Montevideo.
En esa reunión, se abordará el histórico acuerdo de libre comercio entre el Mercosur y la Unión Europea, un tratado que Milei respalda, aunque con reservas respecto a las condiciones actuales del bloque. Paralelamente, el mandatario busca avanzar con un acuerdo de libre comercio con Estados Unidos, en sintonía con la política exterior que pretende alinear a Argentina con líderes conservadores como Donald Trump, Giorgia Meloni (Italia) y Benjamín Netanyahu (Israel).
Nuevas alianzas
Desde la Casa Rosada también se busca encabezar la oposición a la Agenda 2030 y a las políticas de diversidad y sostenibilidad promovidas por la ONU, en un giro hacia una agenda conservadora global. Además de acuerdos comerciales, el gobierno planea estrechar lazos en materia militar e inteligencia con países aliados.
Por su parte, la exministra de Relaciones Exteriores Diana Mondino ya había anticipado en septiembre la intención del gobierno de negociar tratados por fuera del Mercosur.
En este contexto, el futuro del bloque regional y la posición de Argentina dentro del mismo se perfilan como temas centrales en el panorama político y económico del país.
Milei insiste en que las reformas o la salida del Mercosur buscan devolverle a Argentina la capacidad de negociar en igualdad de condiciones y fomentar un comercio verdaderamente libre, dejando atrás lo que califica como «prácticas proteccionistas y prebendarias». Sin embargo, cualquier decisión deberá pasar por el Congreso, donde ya se analizan los posibles escenarios y las alianzas necesarias para aprobar una ruptura diplomática de tal magnitud.