El gobierno argentino dispuso ampliar el llamado Impuesto País aplicado a la compra de divisas para la importación de determinados bienes, servicios y fletes al exterior.
En ese sentido, se incorpora el impuesto a otros servicios de transporte por operaciones de importación o exportación de bienes, o su adquisición en el país cuando sean prestados por no residentes, según indica del boletín oficial del gobierno de Argentina, por medio del decreto 377/2023.
La medida tiene vigencia desde el 24 de julio y el Impuesto País será aplicado al 25% para todos los servicios excepto fletes, ya que la adquisición del servicio de fletes al exterior y otros servicios de transporte por operaciones de importación o exportación tendrá una alícuota del 7,5%.
Las autoridades argentinas aclararon que no se grava la importación de bienes y servicios, sino la compra de billetes para hacer esa operación.
Asimismo, la disposición del gobierno aplicará a la importación de las mercaderías comprendidas en la Nomenclatura Común del Mercosur, con algunas excepciones.
De acuerdo con la información oficial, “el impuesto se determinará sobre el monto total de la operatoria por la que se compren billetes y divisas en moneda extranjera, no debiendo considerarse a estos efectos, de corresponder, el importe de los servicios que resulten alcanzados por el gravamen”.