En un movimiento estratégico para revitalizar su economía y fortalecer su presencia en el comercio marítimo global, el gobierno de Brasil, a través del Ministerio de Puertos y Aeropuertos, anunció una nueva fase de inversiones en la industria de construcción naval. La iniciativa será financiada por el Fondo de Marina Mercante y contempla la construcción de nuevos buques, así como la reapertura y creación de astilleros en diferentes regiones del país.
Durante la presentación oficial, el Ministerio destacó que la industria naval brasileña ha sido históricamente un sector estratégico con un gran potencial para generar empleo, innovación y desarrollo tecnológico. “Cada barco construido y cada astillero inaugurado representa un paso muy importante para fortalecer nuestra economía”, afirmó el titular de la cartera, Silvio Costa Filho
El plan busca posicionar a Brasil como un referente mundial en el sector naval, impulsando la generación de miles de empleos directos e indirectos, fomentando la calificación de mano de obra y dinamizando economías regionales. Además, se espera que esta reactivación tenga efectos multiplicadores en sectores clave como el acero, la logística, la tecnología naval y la formación profesional.
El relanzamiento de este sector responde a una visión de largo plazo: reconstruir una cadena productiva sólida que permita al país no solo atender su demanda interna de transporte fluvial y marítimo, sino también exportar embarcaciones y tecnologías desarrolladas localmente.
“Estamos construyendo un futuro en el que la industria naval brasileña vuelva a ocupar el lugar que le corresponde en el escenario global: como motor de desarrollo, soberanía y oportunidades para todos los brasileños”, concluyó el ministro.
La propuesta cuenta con el respaldo del gobierno federal y se inscribe dentro de una estrategia más amplia de reindustrialización y modernización de la infraestructura nacional. Se prevé que los primeros resultados comiencen a observarse en los próximos meses, con el inicio de obras en nuevos astilleros y el lanzamiento de los primeros proyectos navales bajo este plan.
Con esta apuesta, Brasil reafirma su compromiso con una economía más dinámica, inclusiva y orientada al futuro, donde el mar vuelve a ser una ruta hacia el progreso.