El vicepresidente del gobierno de Canarias, Manuel Domínguez, ha instalado a la Comisión Europea (CE) a revisar los recargos aplicados a las flotas marítimas en el archipiélago. Según explicó en declaraciones a la agencia española de noticias EFE, esta medida busca evitar un posible desabastecimiento de insumos y mitigar la pérdida de competitividad que enfrenta la región debido a su condición insular.
Durante una serie de reuniones mantenidas con representantes de la CE y consejeros de la Representación Permanente de España ante la Unión Europea (UE), Domínguez abordó temas relacionados con las normativas ambientales que impactan a Canarias, en especial la implementación del sistema ETS, que grava las emisiones de CO2 en el tráfico marítimo.
El vicepresidente expresó su preocupación por las consecuencias económicas de estos recargos, afirmando que algunas navieras han advertido que el sobrecoste podría obligar a recurrir a proveedores en África para garantizar el suministro de productos esenciales. “Canarias necesita un estudio de impacto que evidencie la urgencia de modificar estas normativas antes de 2026, ya que corremos el riesgo de no poder garantizar el abastecimiento”, enfatizó.
Asimismo, recordó que el 98% de las importaciones canarias se realiza por vía marítima, lo que ya implica un sobrecosto significativo. Señaló la importancia de que las normativas europeas tengan en cuenta las peculiaridades del archipiélago, cuya lejanía supone una desventaja competitiva.
“Es fundamental que la UE comprenda nuestras particularidades. Transportar mercancías por mar conlleva costos que otros territorios no tienen, lo que afecta directamente nuestra competitividad”, afirmó Domínguez.
El jerarca insistió en que Canarias está comprometida con los objetivos europeos de descarbonización para 2050, pero abogó por un ritmo de implementación adaptado a las realidades de la región.
Además, aseguró que el gobierno de Canarias tomará medidas, en colaboración con los puertos del archipiélago, para demostrar el impacto negativo de las normativas actuales en la región. En tanto, propuso que las conexiones marítimas reciban un trato similar al de las conexiones aéreas, con un proceso de adaptación gradual que no ponga en peligro el suministro de insumos.
“Hemos tenido una recepción positiva y nos han invitado a presentar alternativas. Salimos optimistas de estos encuentros”, afirmó.
Finalmente, subrayó la necesidad de incrementar las ayudas estatales, un tema que también trató con representantes europeos, y dijo que Canarias presentará informes detallados para justificar la ampliación de estas ayudas más allá de 2025, con el objetivo de sostener el transporte de mercancías y pasajeros.