Con un cambio de autoridades nacionales el 1 de marzo de 2025, Uruguay iniciará un nuevo período de gobierno, lo que siempre implica cambios, incertidumbre y la esperanza de mucho diálogo.
El Centro de Navegación (Cennave) ya ha hecho pública su agenda para el quinquenio e insiste en que no cortar los procesos es parte primordial.
En ese sentido, la presidente del Cennave, Mónica Ageitos, dialogó con ComexLatam y puntualizó lo que espera para 2025, además de referirse a algunos cambios que el sector privado está reclamando.
¿Qué se espera de cara al próximo año con el cambio de gobierno?
Lo que esperamos es que se puedan terminar de definir algunas de las obras más importantes del puerto de Montevideo, que se proteja la ley de puertos y que se tenga mucho cuidado si se quiere modificar algo. Hay procesos que se iniciaron y tienen que concluir; y otros que deben ser acelerados. Mientras tanto, es necesario que haya una buena planificación pensando en el futuro y, para ello, hay que elaborar un plan maestro portuario para todo el país. Debemos saber qué carga potencial se puede captar y qué se necesita para que la carga no solo se mantenga en nuestros puertos, sino que crezca. Es importante estudiar todos los proyectos que hay en el país y analizar cuáles son necesarios y cuáles hay que potenciar. Porque es verdad que hay muchas iniciativas, pero para ello es importante tener una visión del camino a seguir en materia portuaria.
¿Cuáles son esas obras más importantes a las que se refiere?
Son varias, pero claramente es una visión unánime que el mantenimiento del canal y el antepuerto a 14 metros de profundidad es una de las principales, así como mantener el calado de los muelles. Pero también recordemos la necesidad de cortar el Freud A del muelle de cintura, que hoy significa un obstáculo para el atraque de barcos de determinado tamaño, que ya están llegando a la región. En otro orden, recordamos la necesidad de trabajar seriamente para recuperar las cargas en tránsito que se han perdido.
¿Por qué se han perdido esas cargas?
Hay distintas razones pero, por decisión de algunas navieras, dejaron de pasar algunas cargas paraguayas.
¿En cuanto a la planificación, cómo debería ser el modelo de trabajo?
Creo que debería contratarse una consultora internacional de experiencia y de primer nivel. Es necesario que los análisis tengan una visión externa, pero entendiendo la realidad del país. Por eso puede ser buena la participación de los técnicos de la Administración Nacional de Puertos (ANP) en cuanto a la realidad local, pero una consultora internacional es la que tiene que hacer un estudio serio de las cargas para decir qué es lo que se necesita realmente.
¿Cómo está siguiendo la realidad de los canales de navegación
El sector privado está viendo que hay nuevos proyectos en la región, para nuevas cargas y más volumen, pero que la infraestructura de los canales de navegación es la misma que se tiene desde hace varios años. Esto es otra cosa que amerita un estudio serio para la profundización y el ensanche de las vías navegables. Por otra parte, más allá de la infraestructura, lo que se necesita es una actualización de los aspectos institucionales, en especial de la Hidrovía Paraguay-Paraná (HPP) y su Comité Intergubernamental (CIH).
¿En qué sentido se precisa esa actualización?
Hoy sube un peaje en cualquier momento, sin previo aviso, mientras existe una institución como el CIH, y otras, que no son ni consultadas. El acuerdo ya tiene muchos años y por eso debería haber algunas herramientas más que permitan controlar estas cosas y no que por una decisión unilateral, de un día para otro, aparezca una suba de peaje de más del doble, como ocurrió en el último tiempo.
¿Y qué habría que mejorar para lograr un mecanismo de control?
Puede ser la estructura del CIH, instaurar algún mecanismo de consulta obligatoria o de instancias de estudio de las decisiones que se toman. No puede ser que los actores se enteren de los cambios cuando les llega la factura con el incremento. Hay cosas que van de la mano. Es tan necesario que los canales estén preparados para el futuro flujo de carga, como que institucionalmente haya un orden para que se puedan hacer frente a la realidad que se viene.
¿Cómo fue el impacto del peaje en el puerto de Nueva Palmira?
El puerto está siendo muy afectado por el aumento del peaje. Anteriormente enfrentó el riesgo de perder movimientos por temas climáticos y tuvo la inteligencia de reconfigurar el negocio para que el mineral de hierro diera un salto importante. Pero con este peaje los negocios ya se están complicando.
¿Qué rol espera cumplir el Cennave en los años de la nueva administración?
El Cennave siempre está a las órdenes de las autoridades para aportar y colaborar desde su posición. Esperamos que haya diálogo con el nuevo gobierno y que aquellos que estén al frente de la toma de decisiones escuchen la voz del sector privado, que es el que está todos los días en la actividad y el que entiende de los temas y sabe cuáles son las tendencias en el mundo. Como privados sabemos qué es lo que se viene y estamos atentos a eso. Por esa razón incluimos en nuestros puntos de agenda, como propuestas al próximo gobierno, formar parte del directorio de la ANP, con voz y sin voto, pero para aportar lo nuestro de primera mano, sin pérdidas de tiempo. La idea es llevar al directorio lo que piensa el sector privado, lo que está viendo que se viene a futuro y adelantarnos a tomar decisiones.
¿Qué respuesta han tenido del gobierno electo?
Nosotros se lo hemos planteado, justamente, al presidente electo, al igual que las demás propuestas. Obviamente no nos adelantó una posición al respecto, pero sí pudimos tener la instancia de explicarle los motivos, al igual que el resto de nuestras propuestas.
También han planteado sumar a un integrante del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) a la comisión del 125, relacionada con el reglamento de prácticos. ¿Cuál es el objetivo?
Entendemos que es de total justicia. Cuando uno está estudiando una paramétrica de ajuste, de un costo tan importante como es el practicaje en los puertos de Uruguay, es necesario que exista un delegado del MEF. Hay algunos temas que han terminado en juicios importantes, justamente por no tener un asesoramiento en los temas de las paramétricas.
La ley de puertos sigue siendo un pilar de la actividad. ¿Necesita una actualización?
Creo que la ley de puertos no se debe tocar. Ha sido una política de Estado que se ha mantenido por más de 30 años y ha atravesado a gobiernos de todos los partidos. Es una ley que ha dado resultado y siempre es un riesgo hacer modificaciones en algo que está funcionando bien. El puerto ha crecido gracias a esta ley y lo que hay que hacer es cuidarla. Y en caso de que pueda considerarse alguna variante, se puede hacer por decreto, sin necesidad de tocar la ley, lo que sería más profundo. Hoy no se me ocurre una situación en la que sea necesario modificar la ley de puertos.