Luego de visitar Asunción del Paraguay, la secretaria de Energía de Argentina, Flavia Royón, aseguró que existe el compromiso de conformar una mesa de trabajo «que busque superar la crisis bilateral con Paraguay por el cobro del peaje en el tramo Santa Fe-Confluencia» de la Hidrovía Paraguay-Paraná (HPP).
Así lo informó el sitio La Política Online aunque, sin embargo, cuando parecía existir un principio de acuerdo entre las partes, las perspectivas volvieron a oscurecerse este martes.
Dicho medio afirma que Royón insistió en la posición argentina sobre el cobro del peaje, pese al rechazo que genera en Paraguay y en los demás países miembros de la HPP, Uruguay, Brasil y Bolivia.
De acuerdo con lo publicado por La Política Online, Royón manifestó que las autoridades paraguayas, concretamente el canciller Rubén Ramírez Lezcano y la ministra de Obras Públicas, Claudia Centurión, reconocieron «el derecho de Argentina de cobrar peaje para el funcionamiento de la hidrovía».
En ese sentido, el presidente guaraní, Santiago Peña, declaró que no se opone al cobro de una tarifa, pero se muestra en contra de la medida arbitraria y unilateral, defendiendo que su aplicación tiene que acordarse entre todos los países que componen el Tratado de la Hidrovía.
Por su parte, luego de la reunión con los secretarios de Estado paraguayos, Royón manifestó que «el gobierno argentino defiende su potestad para la aplicación dicha tasa en base a aspectos jurídicos, técnicos y comerciales de la medida, que permiten reconocer los gastos asumidos por el país en las obras de mantenimiento para garantizar el transporte fluvial a los países de la región».
Ese es el argumento de mayor peso esgrimido por los funcionarios argentinos frente a sus pares paraguayos, pero para estos últimos no son suficientes.
En ese sentido, el planteo de Lezcano y Centurión fue contundente y dejaron en claro a Royón y a la delegación argentina que la mesa de trabajo no sería una instancia para ganar tiempo, sino que se desarrollaría siempre y cuando se suspenda el cobro del peaje en cuestión durante las conversaciones.
Cabe destacar que la reunión entre ambas partes se realizó de urgencia, luego de que el presidente Peña y parte de su gabinete anunciaran el viernes que Paraguay reduciría la cantidad de energía destinada a Argentina a través de Yacyretá, para forzarle a comprar más caro a Brasil.
Fue una medida de presión que se sumó al comunicado conjunto de Paraguay, Brasil, Bolivia y Uruguay rechazando el peaje «unilateral» cobrado por Argentina.
Tras esto, la tensión volvió a escalar luego de que el embajador argentino en Paraguay, Domingo Peppo, acusara al gobierno de Peña de «pasarse de la raya».
Ante esta acusación, los ministros paraguayos optaron por la prudencia y dejaron que las estridencias corrieran por fuera del Ejecutivo.