Panamá, con una población de 4,5 millones de habitantes, formalizó este viernes su ingreso al Mercosur como Estado asociado, según informó el diario El Economista de México. Esta categoría no le confiere voz ni voto en el grupo, pero representa un importante acercamiento del bloque sureño hacia un país clave en el comercio mundial.
El presidente panameño, José Raúl Mulino, describió el ingreso como «una tremenda oportunidad» y un «paso adelante muy importante en materia de comercio exterior y regional, relaciones internacionales y de integración». Este movimiento permitirá a Panamá explorar vías de libre comercio con los países del Mercosur y fortalecer sus lazos económicos en la región.
El Ministerio de Comercio e Industrias de Panamá subrayó en un comunicado que este proceso de integración «refuerza los lazos con el bloque e impulsa la capacidad de atraer inversiones estratégicas y mejorar la competitividad del país en la región».
La categoría de Estado asociado externo al Mercosur puede ser un paso previo a la integración plena, como sucedió con Bolivia que primero se unió como Estado asociado en 1996, luego inició su proceso de adhesión en 2012 y se convirtió en miembro con todas las potestades en julio de 2024.
El especialista y profesor de Relaciones Internacionales en la Universidad Católica del Uruguay, Ignacio Bartesaghi, considera que «Panamá, por su perfil, importancia estratégica, ubicación geográfica, canal navegable y relevancia económica y comercial, es un socio clave para el Mercosur».
En ese sentido, destacó que este nuevo vínculo con América Central, donde Panamá se sitúa, representa una potencialidad significativa para fortalecer las relaciones y ampliar los horizontes del bloque.
Con Panamá, ya son siete los Estados asociados al Mercosur: Chile, Colombia, Ecuador, Perú, Guyana y Surinam.